Extraña



Ella es extraña y no extraña nunca a nadie. Es el ser más desapegado que conocí en mi vida, aunque sería mejor caracterizarla como indiferente, lo cual sí es grave, mientras que el desapego puede llegar a ser sano. Ahí radica su mayor rasgo de extrañeza, en la apatía hacia los demás seres vivos, sean personas, perros, gatos u otras formas de vida. 
Habita sola una casa grande poblada de grandes plantas que se cuidan solas por obra y gracia del espíritu santo, que no han visto una tijera de podar en su vida entera, que producen vida sin recibir nada a cambio por parte de ella, de la extraña.
Lo peor es que la extraña es bella, sana de cuerpo, aunque de la mente no estoy tan segura. A veces me pregunto si se hace la excéntrica para llamar la atención, para no ser una más de la masa, o si realmente hay algo que le baila en el cerebro a la hora de ver la vida y tomar algunas decisiones. Quizás vea y sienta todo a la inversa, y le sea natural ese ostracismo que logró ahuyentar hasta a su propia madre.
Al verla pasar por la puerta de mi casa, mi respiración se detiene unos segundos, y eso que no soy miedosa, pero siento una vibración extraña, tan extraña como la que pasa delante de mí como si no existiera, una sensación de cosquilleo tenebroso... como si en vez de una mujer cualquiera, fuera una muerta viva.

Nota: Ilustré el cuento con la foto de la casa natal de mi madre.

Comentarios

Beatriz ha dicho que…
Emoción en estado puro.Esa extraña sensación que a veces nos invade cuando creemos sentir la proximidad de alguna extraña presencia tal vez reconocida y ya lejana.
Imagino que la fotografía va íntimamente ligada al contenido del texto. ¿acaso me equivoco?. Porque cuando el texto pasa a ser del lector crece en su imaginación. Se trasforma.

Un beso amiga.
(aquí las circusntancias sociales y económicas hacen que cada vez tengamos menos tiempo para las cosas que dan placer al alma). Se que me entiendes.-
Raquel Barbieri ha dicho que…
Querida Beatriz,

Antes que nada, lamento la situación por las que están pasando en España. El mundo está patas para arriba, todo mal... espero que ustedes, mis amigos, no pasen necesidades.

En cuanto al relato, se me ocurrió pensando en esas personas algo enajenadas que no sabés cómo es que están vivas.
Ilustré con la foto de la puerta de la casa natal de mi mamá porque esa casa está buenísima para crear historias. Cada vez que paso por allí, se me ocurren cosas...

Un gran beso y gracias :)
Aronson ha dicho que…
¡Waw, es como si la hubiera visto pasar!
Raquel Barbieri ha dicho que…
... y quizás la viste, Gi... pasa por Villa del Parque, Devoto, Flores, Belgrano y Haedo...
Jerónimo ha dicho que…
Lo único que puedo pensar que si a vos, querida Raquel, el paso de la EXTRAÑA te da un cosquilleo tenebroso y en cierta forma una sensación de miedo, que le ocurrirá a Renata en la misma situación? Posiblemente huirá despavorida y se esconderá debajo de la mesa o de la cama, hasta que las vibraciones de la EXTRAÑA, muy perecptibles para un animal sensible, hayan pasado a la lejanía.
Besos
Jerónimo
Raquel Barbieri ha dicho que…
¡Ya tuvo que ver Renata con la historia y todo!... jajajaja... al final se va a convertir en un perro celebrity como Rin Tin Tin y Lassie.

(Seguro que se mete debajo de la cama si pasa la Extraña).

Besos :)

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